En blanco y negro, o tonos sepia, susurros de luz,
momentos capturados, suspendidos en un vuelo,
los marcos encierran la esencia de risas y lágrimas,
ecos de vida que desafían el paso del tiempo.
Una sonrisa juvenil, ahora polvo en la brisa,
ojos que danzaban de alegría, ahora sombras al pasar,
cada imagen, un portal a épocas que se desvanecieron,
historias de amor en los espacios que habitan.
En la quietud se reúnen, estas reliquias queridas,
un testamento susurrante en la esfera fugaz del tiempo,
hablan de conexiones, los lazos que aún perduran,
en recuerdos tejidos, nuestros corazones entrelazados.
Los dedos acarician rostros, la calidez de su resplandor,
mientras la luz entona una melodía suave y lenta,
¿Quién podía imaginar que un instante podría persistir,
una fotografía atesorada, un susurro de un amigo?
A través de temporadas de dolor, risas y conflictos,
capturan el latido del corazón, el pulso de la vida,
una instantánea de alegría, un atisbo de nuestro sufrimiento,
en cada imagen fija, un universo por redescubrir.
Así que en el silencio, pasamos la página,
en la galería de la memoria, viajamos a través de las eras,
porque las fotografías perduran, sin ceñirse al aliento,
en el tapiz tejido, hallamos vida en la muerte.
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In black and white ,or sepia tones and whispers of light,
Captured moments, frozen in flight,
Frames hold the essence of laughter and tears,
Echoes of life that defy passing years.
A smile from youth, now dust in the breeze,
Eyes that danced with joy, now shadows with ease,
Each image a portal to times long since fled,
Stories of love in the spaces they tread.
In stillness, they gather, these relics so dear,
A testament whispered through time's fleeting sphere,
They speak of connections, the ties that still bind,
In memories woven, our hearts intertwined.
Fingers trace faces, the warmth of their glow,
As light plays a melody, soft and slow,
Who knew that a moment could linger, extend,
A photograph cherished, a whisper of friend?
Through seasons of sorrow, through laughter and strife,
They capture the heartbeat, the pulse of our life,
A snapshot of joy, a glimpse of our pain,
In every still picture, a world to regain.
So here in the silence, we turn back the page,
In the gallery of memory, we roam through the age,
For photographs linger, not bound by the breath,
In the tapestry woven, we find life in death.
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